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Publié le | Catalunya Esp, España
La cara sur de Montserrat, cerca de Can Jorba. El barranco se desciende mejor en el camino de vuelta después de escalar el Joc de l'Oca. El descenso es bastante difícil debido al equipamiento mínimo, obligando a escalar estrechos barrancos contra la roca o a escalar en libre pequeñas paredes. Los seguros bien situados permiten rapelar en los pasos difíciles y la canal termina con 2 grandes rápeles de 30 a 35 m seguidos de un último rápel aéreo que te deja literalmente en el camino de aproximación, ¡en medio de zarzas! Un barranco típico de Montserrat, empinado y salvaje.
Localización ✦ Collbato
Región ✦ Montserrat, Catalunya
País ✦ España
Tipo ✦ Cañón torrencial
Desnivel ✦ 250m
Dificultad ✦ v3-a1-II
Máximo descenso en rápel ✦ 35m
Duración ✦ 1h30 a 2h
Distancia ✦ 900m
Desde Barcelona, tome la A2 en dirección a Leida y salga en Bruc. Atraviese olivares hasta el aparcamiento de Can Jorba, en la pista entre Vinya Nova y Collbato, donde empieza la carretera de acceso.
Diríjase hacia el oeste por la pista principal para coger el camino que sube a la derecha hacia Coll de Mosset. Gire a la derecha en la cima para encontrar el cauce del torrente y tómelo cuesta abajo (no hay señales). Pronto encontrará las primeras cuerdas y cadenas que señalan el camino. También se puede llegar pasando por el canal del Joc de l'Oca y volviendo al inicio a la izquierda.
El cañón está orientado al sur y tiene 13 rápeles, algunos de los cuales pueden evitarse desescalando. El equipo existente es bueno, pero se requiere un mínimo de 70 m. Evite el tiempo lluvioso.
Descienda por el lecho del torrente y, unos metros más abajo, el camino se estrecha para entrar en la roca pulida por las aguas. El equipamiento es mínimo, y con la ayuda de algunas cuerdas anudadas o cadenas oxidadas, se atraviesan rápidamente los primeros tramos, deslizándose de un lado a otro sobre pequeñas piscinas naturales todavía llenas de agua de lluvia.
El primer rápel atraviesa una pared de diez metros y el lecho del torrente se estrecha cada vez más, zigzagueando por el camino del agua. Algunos tramos se suben libremente, por la pared rocosa, evitando los 2 ó 3 rápeles previstos para la ocasión. El canal es muy estrecho, y así comienzan los pasos en oposición de apoyo, pie-pie o más graciosamente mano-pie e incluso mano-mano con los pies en el vacío.
El segundo rápel es unos quince metros más largo y luego el descenso se hace cada vez más empinado. Podemos divisar la salida en las grandes paredes frente a nosotros. Después de una buena hora de equilibrios variados, llegamos por fin a los 2 últimos rápeles, de unos treinta metros cada uno y magníficos, con vistas al valle y a la llanura sur de Montserrat. Los últimos 10 metros los pasamos suspendidos por encima del camino de vuelta, aterrizando literalmente en medio de zarzas.
Tomar el camino de aproximación al Joc de l'Oca en sentido contrario.
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